
Pero la teoría no siempre se cumple en la realidad. ¿Y cuál es la realidad de muchos de estos Very Important Bloggers (VIBs)? Pues muy distinta, señores. Muy distinta a lo que pregonan. Lejos de predicar con el ejemplo, muchos de estos líderes blogosféricos van literalmente a su bola, no se implican en nada, no contestan a correos electrónicos, no participan en ninguna iniciativa en la Red (y si lo hacen es porque hay amiguetes o intereses por el medio), no enlazan con la blogosfera llana (¡horror!), no conversan nunca con sus propios lectores... Na de na de na. Van a lo suyo, tiran para adelante, les encanta autoenlazarse y obvian que se contradicen constantemente con su absoluta falta de interactividad. No son muchos, pero influyen lo suficiente con sus palabras. También con sus silencios.
Afortunadamente nos queda ese pueblo llano con blog a cuestas. Los cientos de miles de bloggers que, sin medallas ni galardones, mantienen el buen nombre de la blogosfera. Esos que se comprometen, enlazan, participan, se ilusionan con casi todo y piden permiso cada vez que llaman a una puerta digital. No están endiosados, son humildes y coherentes, reconocen que lo suyo es aprender de todo esto y admiten que el buen rollo y las mejores intenciones son dos de los pilares más fuertes de la blogosfera. Por eso gracias a ellos --sólo a ellos-- esta iniciativa a escala global ya roza los 150.000 enlaces. Gracias, gracias, gracias.
PD: Este post llevaba madurando en mi barrica mental más de 12 meses, fruto de una decepción personal con tanto superblogger ciego, sordo y mudo. Si eres VIB y te das por aludido, ya sabes de qué pie cojeas. Ya va siendo hora de que lo sepas.
Post enlazado en Soloperiodistas.com • Jack Daniel's Blog • Menéame • Islas Cies Blog • Marcelino Madrigal • Mundo.es • McShuibhne • Jon Kepa